Un cielo nublado antecede la llegada del verano en Cancún, que, en esta ocasión, alberga a diplomáticos de las 35 naciones que integran la Organización de Estados Americanos (OEA) para su 47 Asamblea General. Las discuciones de temas de alcance regional tienen como sede este paraíso del Caribe que cada año recibe a turistas de todo el mundo –19 millones en 2016– y que representa el destino mexicano más conocido a nivel internacional.

El centro de convenciones del hotel Moon Palace es el escenario de las reuniones de los cancilleres que vienen y van buscando acuerdos para la región, pero a 23 kilómetros de ahí, un episodio interrumpe la tranquilidad del destino turístico. En la entrada de la plaza Malecón Américas –una de las más concurridas de Cancún–, un hombre es asesinado a tiros por otros que le disparan desde un auto en movimiento a plena luz del día. El hecho deja una postal que, en los últimos meses, ha sido recurrente en este paraíso mexicano.

Apenas cuatro días antes, en la zona hotelera de Cancún, elementos de la Gendarmería habían hallado a dos personas asesinadas en la entrada de una torre de condominios. En esa misma semana, una balacera en una de las avenidas del centro de esa ciudad había provocado pánico entre los habitantes.

Estados Unidos, Canadá y Reino Unido han emitido alertas de viaje a sus ciudadanos para que extremen precauciones.

Los números lo dicen todo. Quintana Roo, estado que alberga los destinos turísticos más importantes del país (Playa del Carmen, Tulum, Cancún, Cozumel), ha tenido un incremento en las defunciones por homicidio doloso. Tan sólo de enero a agosto de este año, el total de muertes intencionales ya rebasó el de años pasados, al registrarse 207 eventos, de acuerdo con cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.

Pero este destino no es el único con el problema. En el último año, otros estados que también albergan ciudades importantes para el turismo han tenido un incremento en sus índices delictivos, como Baja California, Nayarit, Jalisco y Guerrero.

Esta situación ha prendido los focos rojos tanto a nivel local como internacional, donde Estados Unidos, Canadá y Reino Unido –que concentran 73.6% de visitantes internacionales que llegan a México– ya han emitido alertas a sus ciudadanos para que extremen precauciones en sus visitas a Los Cabos, Playa del Carmen, Cozumel, Acapulco y Puerto Vallarta, entre otros lugares.

El 22 de agosto pasado, Estados Unidos actualizó su alerta de viaje en la que incluyó algunos de los anteriores destinos. Estas advertencias van desde evitar zonas cali ficadas como “conflictivas” o “peligrosas” hasta la prohibición estricta –tanto para sus ciudadanos como para su personal de gobierno– para viajar a ciertas regiones.

Entre las razones que se mencionan están la presencia de grupos del crimen organizado y de autodefensas, y la sucesión de actos violentos, como la balacera ocurrida en enero en la discoteca Blue Parrot de Playa del Carmen, donde fallecieron una ciudadana de EU, uno de Canadá y otro de Italia.

“Los ciudadanos estadounidenses deben ser conscientes de que, de acuerdo con las estadísticas del gobierno de México, el estado de Quintana Roo experimentó un aumento en las tasas de homicidios en comparación con 2016. Mientras que la mayoría de estos homicidios parecían ser objeto de organizaciones criminales, en áreas frecuentadas por ciudadanos estadounidenses, se han producido incidentes de tiroteo, en los que personas inocentes han sido heridas o muertas”, dice la advertencia.

En el caso del estado de Guerrero, el Departamento de Estado del país vecino incluye, además, la prohibición para que el personal de gobierno visite dicha entidad, incluyendo Acapulco, municipio que ha tenido un incremento en sus niveles de inseguridad en los últimos años. Otros estados sobre los que EU ha emitido alertas son Baja California, Nayarit y Sinaloa.

El gobierno británico hace mención especial sobre Acapulco, por registrar varios hechos de violencia dentro y fuera de la zona turística, por lo que recomienda a sus ciudadanos viajar en avión y mantenerse alertas.

En el caso de Canadá, la recomendación se enfoca, principalmente, a estados del norte, como Chihuahua, Sinaloa, Sonora y Tamaulipas, por la gran presencia de grupos del crimen organizado. Ahí también menciona Guerrero, incluido Acapulco, y Michoacán, a donde recomienda no viajar si no es estrictamente necesario.

“Hay preocupaciones específicas de seguridad que podrían ponerlo en riesgo. Debe reconsiderar su necesidad de viajar al país, territorio o región”, señala el gobierno canadiense sobre Guerrero.

El impacto de las alertas

La emisión de advertencias ante hechos violentos en Cancún, la Riviera Maya y Los Cabos impactó ya en el sector hotelero, donde los empresarios han registrado una caída en el número de reservaciones para los próximos seis meses, lo que se traduce en pérdidas económicas para el sector.

“Se habla de entre un 25 y un 30% en la disminución de reservaciones, eso indica ya un panorama a la baja para los próximos meses. De aquí a marzo, las reservaciones no van como el año pasado, está empezando a preocupar a los hoteleros”, reconoce Rafael García, presidente de la Asociación Mexicana de Hoteles y Moteles (AMHM).

Desde los destinos, los empresarios aseguran que no hubo impacto en la pasada temporada de verano, pero consideran necesario que las autoridades pongan atención al tema de la seguridad.

Francisco Jorge Sena, vicepresidente de la Asociación de Hoteles de Quintana Roo, considera que el tema de la inseguridad se debe atender de manera integral, con una buena estrategia de prevención, esquemas de inclusión social y de fortalecimiento del tejido social.

En esto coincide Javier Aranda, director general del Fideicomiso de Turismo Puerto Vallarta, quien pide trabajar en conjunto para reducir el impacto al sector y brindar la tranquilidad que buscan los viajeros.

Puerto Vallarta y Los Cabos son otros destinos donde la violencia ha llamado a la puerta. En agosto del año pasado, la zona hotelera de Puerto Vallarta fue escenario del secuestro del hijo de Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán por un comando armado que irrumpió en un restaurante, mientras que, este año, en una playa de Los Cabos fueron asesinadas tres personas en pleno periodo vacacional

brillo perdido

Del Acapulco al que alguna vez llegó a bañarse en sus playas el jet set de Hollywood, sólo queda el recuerdo. Desde hace varios años, este puerto dejó de aparecer en las listas de los primeros lugares de visitantes para ocupar los primeros puestos, pero de las ciudades más inseguras del país y del orbe. Su tasa de homicidios de 113.2 por cada 100,000 habitantes, la colocó este año como la segunda más peligrosa del mundo, después de Caracas, Venezuela, según un reporte del Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y Justicia Penal.

La primera tarea de promoción es la seguridad. El valor del turismo es muy grande, no podemos descuidarlo”.

Enrique de la Madrid,
Secretario de Turismo federal.

Los niveles de inseguridad han llevado al declive este destino. En nueve años, el puerto ha perdido 89% de las visitas internacionales que llegan vía aérea, al pasar de 100,453 en 2008, a 10,626 en 2016, de acuerdo con registros de Aeropuertos y Servicios Auxiliares.

A la caída en la llegada del turismo internacional, se suma la pérdida de capital extranjero. En abril pasado, cerró sus puertas el hotel Crowne Plaza, luego de que la firma estadounidense IHG lo desincorporara del grupo. Antes, ya se habían ido del puerto las compañías hoteleras Hyatt Regency, Marriott International, Sheraton y Fairmont. La única firma extranjera que resiste es la asiática Banyan Tree, cuyos complejos turísticos se encuentran en la Zona Diamante.

Otra empresa que ha decidido eliminar Acapulco de su itinerario es la compañía de cruceros Holland America Line, que, en marzo pasado, anunció que no haría más escalas en el puerto a causa de la inseguridad, aunque, de acuerdo con hoteleros, este problema ha comenzado a mermar en estos meses.

“En Acapulco, el tema de la inseguridad se desbordó, se dejó crecer. Hoy diría que se está controlando un poquito y parece que va a la baja, aunque sigue habiendo problemas con las bandas. He estado en contacto con los empresarios y me dicen que ya empiezan a notar un cambio”, señala el líder hotelero.

En la administración del gobernador Ángel Aguirre se anunció un rescate de Acapulco, en el participarían empresarios, e, incluso, el cantante Luis Miguel realizó algunos promocionales para incentivar la visita al puerto, pero llegó el huracán Manuel, hubo muchos afectados y hubo que atender la emergencia.

Seguridad, tema prioritario

El Secretario de Turismo federal, Enrique de la Madrid, reconoció, en abril pasado el tema, de la inseguridad como uno de los principales desafíos para el desarrollo del sector. “Nuestra primera tarea de promoción es la seguridad. El valor estratégico del turismo es muy grande y no podemos descuidarlo”, dijo en una reunión con gobernadores.

En aquella ocasión, anunció el inicio de los trabajos para poner en marcha un modelo de seguridad para los destinos turísticos con “instancias policiacas bien equipadas y pagadas”.

Esta propuesta es bien recibida por empresarios del sector, quienes consideran que, para erradicar la violencia en zonas turísticas, es necesaria una solución integral, con lo cual esperan poder recuperar la confianza de los visitantes en los destinos turísticos de México.

“Sabemos que no es un proceso que lleva un mes, lleva años. Todo es un proceso de vigilar, prevenir (...) castigar y sancionar. Creo que, con ello, se puede erradicar esta mala imagen que se ha dado, sobre todo, en regiones turísticas”, dice García, pero resalta que debe acompañarse con una mayor presencia de cámaras de videovigilancia, la capacitación de policías turísticas y mayor promoción de los destinos.

Un primer paso que el gobierno ha dado en este sentido es la creación de un Centro de Atención y Protección al Turista (CAPTA) el cual opera en Los Cabos, donde, además de ofrecer orientación a los visitantes, se da respuesta y se canalizan denuncias relacionadas con situaciones de riesgo.

Expansión buscó a representantes de la Secretaría de Turismo, de Gobernación y de la Comisión Nacional de Seguridad, para tener más detalles del modelo de seguridad, pero no obtuvo respuesta al cierre de esta edición.